PON VERDE TU COCINA

La conciencia ecológica también ha llegado a las cocinas. Sí, sabemos que hay algunos cambios que requieren algo de inversión económica, pero que no cunda el pánico, hay muchos otros que son bastante sencillos y que puedes aplicar para que tu cocina sea más respetuosa con el medio ambiente, sostenible y eficiente sin perder encanto y belleza. Toma buena nota de estas ideas.

Materiales y mobiliario ecológico y libre de contaminantes.  Si quieres diseñar una cocina más sostenible es conveniente que, además de apostar por elementos naturales y orgánicos, utilices mobiliario y materiales ecológicos respetuosos con el medio ambiente, que estén fabricados con materias primas 100% reciclados y reciclables o procedentes de explotaciones controladas. Así, por ejemplo, si te decides por la madera asegúrate de que proviene de bosques sostenibles (certificado FSC). Con ello, además de respetar la naturaleza, estarás ayudando a cuidar el medio ambiente, reducir las emisiones de CO2 y evitar el calentamiento global.
Por otro lado, el bambú, que crece rápidamente en la naturaleza, es un material que ofrece muchas posibilidades. Se trata de una buena opción ya que sus cualidades: resistencia, durabilidad, facilidad de limpieza y mantenimiento permiten que pueda aplicarse en el mobiliario, puertas o ventanas; además, al ser antibacteriano resulta ideal para utilizarlo en la encimera y también en objetos decorativos y accesorios de cocina y menaje. Asimismo, asegúrate de evitar todos aquellos materiales contaminantes y peligrosos como puede ser el plomo, cromo, amianto, mercurio, entre otros, es otra de las claves que has de tener en cuenta a la hora de diseñar una cocina eco.
Recuerda que la filosofía de las 3R (reciclar, reducir y reutilizar) también es aplicable a la decoración y al diseño. Por eso, la alternativa de reciclar y restaurar muebles antiguos y darles una nueva vida reutilizándolos es una alternativa sostenible y estéticamente interesante con la que conseguirás un estilo vintage y rústico muy atractivo.

Electrodomésticos eficientes. Según un estudio, casi la mitad del gasto de la factura de la luz en un hogar proviene de los electromésticos. Y de ellos el frigorífico es el que más gasta (19% de la factura eléctrica). El consumo de los aparatos eficientes, aunque resulten un poco más caros, es mucho menor, por eso la inversión la amortizarás con los años, ya que a la larga ahorrarás en energía y en el factura de la luz. No te lo pienses y utiliza electrométricos de etiqueta A++, que son los que implican un consumo energético más bajo y son respetuosos con el medio ambiente.
¿Sabías que la distribución de la cocina también influye a la hora de ahorrar energía? Siempre que puedas no sitúes el frigorífico junto al horno o el microondas, porque al recibir más calor tendrá que trabajar más. Si por el contrario está alejado de ellos le será más fácil mantener la temperatura ideal.
Por otro lado, también es conveniente matizar que las placas de inducción consumen bastante menos energía que las vitrocerámicas o las cocinas de gas. Además, al tardar menos tiempo en calentarse la comida se cocina antes y la placa se apaga automáticamente al quitar las sartenes, ollas o cazuelas.

La importancia de una iluminación responsable. En una cocina ecológica y sostenible la iluminación también es importante. Con el uso de fuentes de iluminación LED podrás rebajar la energía que consumes –de hecho de un 85%– y son menos contaminantes que las bombillas incandescentes.

Objetivo: ahorrar agua.  No desperdiciar agua es una de las medidas más convenientes para conseguir una cocina ecológica. Con el uso de un aireador en la boca del grifo –disminuye el caudal de agua– es posible ahorrar bastante (consumirás un 30% menos de agua), ya que será el aireador el que controle qué cantidad de agua consumes. Lo agradecerá el medio ambiente y lo notarás en la factura. Recuerda usar solo el agua necesaria, por tanto, no dejes nunca el grifo abierto cuando estés fregando o llena el fregadero o un recipiente a la hora de lavar fruta, verduras y demás alimentos. Más consejos: deja a un lado el plástico que genera muchos residuos al tener que desecharse continuamente y usa botellas de vidrio reutilizables, que además están libres de tóxicos.          

Materiales reutilizables, eco y sostenibles para los utensilios y accesorios.  Los materiales sostenibles y reutilizables no pueden faltar en una cocina eco. Apuesta por algodón orgánico para trapos, delantales o bolsas de malla para conservar los vegetales y la fruta, tarros de cristal para guardar legumbrres, pasta, condimentos y demás, tablas de cortar de madera de haya o cedro certificada, acero de carbono en los cuchillos, celulosa vegetal para el estropajo, peladores de acero inoxidable, papel de conservación reutilizable elaborado a base de cera abeja autoadhesivo que preserva más tiempo los alimentos…

    

A la hora de cocinar apuesta también por la sostenibilidad. ¿Cómo? ahorra energía, agua y consume productos locales y de temporada; evita el desperdicio de alimentos y recicla los residuos en sus contenedores correspondientes.

Despídete de los productos químicos para limpiar la cocina.  Sustituye los productos químicos de limpieza por otros ecológicos y sostenibles que no dañen ni tu salud ni el medio ambiente.

 Con estos trucos ahorrarás energía en la cocina:

  • Tapa las cacerolas y utiliza ollas a presión, consumirás menos energía.
  • Si tu cocina es eléctrica apágala cinco minutos antes de terminar la cocción, así aprovecharás el calor residual.
  • No abras la puerta del horno si no es necesario, ya que cada vez que la abras estarás perdiendo un 20% del calor que se había acumulado.
  • No olvides mantener siempre limpia la parte trasera del frigorífico, conseguirás reducir el consumo hasta en un 15%.
  • Mantén la temperatura adecuada del frigorífico, cada grado por debajo de lo recomendado provoca que aumente un 5% el consumo.
  • Si quieres ahorrar energía olvídate de introducir alimentos calientes dentro del frigorífico.
  • Abre la puerta del frigorífico solo lo necesario y ciérrala lo más rápido posible, así no se perderá el frío acumulado de la nevera.
  • Si tienes lavavajillas ponlo en marcha solo cuando esté lleno; en el caso de que tuvieras que usarlo antes emplea programas rápidos y económicos.
  • Lava con programas de baja temperatura, consumen menos energía.
  • Apuesta por detergentes líquidos y mantén siempre limpio el filtro de la lavadora, te ayudará a reducir el consumo energético.
 
Fotos: Unsplash. Pinterest. Pixabay. Zuperzozial. Jaus'n wrap. A Slice os green. Berlinger Haus.

Dejar un comentario

Por favor tenga en cuenta que los comentarios deben ser aprobados antes de ser publicados

Este sitio está protegido por reCAPTCHA y se aplican la Política de privacidad de Google y los Términos del servicio.


Explora más